Uno de los inspectores nos explicó que en los años 80 el Gobierno tenía la necesidad de aumentar el número de profesores, presionado también por el Banco Mundial. Para hacer una contratación masiva y rápida utilizaron la fórmula del voluntariado.
Durante los años de voluntariado previos a su integración en la función pública los profesores cobraban 50.000 francos CFA al mes, que son al cambio actual unos 76 euros. En concreto el profesor que nos lo contaba se había pasado como voluntario algo más de diez años.
Ese sueldo hay que enmarcarlo en una sociedad en la que formar una gran familia es importante y en la que la familia no son sólo la mujer y los hijos, sino los abuelos y los hermanos y hermanas del cabeza de familia.
Lo que el profesor nos decía es que ya las cosas habían cambiado y el voluntariado sólo dura un año, tras el cual el profesor pasa a ser funcionario y cobra 110.000 francos CFA, unos 169 euros. Pero claro para esa evolución han necesitado más de diez años.
Para ser profesor la formación que se exige es el bachillerato, pero igualmente gente con formación como el agente de la ONG que trabaja en Ourossogui y con el que hemos pasado estos días no cobra más.
Cuando él estaba estudiando en Francia y trabajaba podía ganar entre 1.000 y 2.000 euros tuvo que pensarse muy bien volver a Senegal para trabajar sobre el terreno, algo imprescindible en su carrera, y pasar a ganar los 50.000 francos CFA. Con ese dinero debe vivir él y su familia numerosa a la que envía dinero todos los meses.
Además al estar dado de alta, su sueldo no aumenta hasta que no se case y seguirá aumentando en función de que aumente la familia. Por lo que nos ha dicho Mouhamed lo más habitual en Senegal es el trabajo no regulado, que les permite vivir al día con más dinero aunque en un futuro no tengan derecho a jubilación.
En las zonas rurales lo habitual es ser pastor o agricultor, muchos aspiran a montar un negocio pero para hacer deben irse a otra región porque si lo haces en la tuya tus familiares y amigos te pedirán que les fíes y les ayudes y no puedes negarte por lo que el negocio sería un desastre.
Estos pequeños reportajes sobre la vida aquí se limitan a lo que he conocido en estos días y lo que me ha explicado la gente que he conocido, habría que buscar más fuentes para dar una imagen más completa de la realidad en Senegal pero espero que os resulte interesante lo que os cuento.